viernes, 26 de diciembre de 2014

Él


Por mucho que nazca el Hijo de Dios
todos los años, yo no acierto a conocerlo.

Y lo siento con toda el alma mía.

Qué cosa tan grande debe de ser
estar impregnado de su Amor.

¡Es tan corta la vida ante el misterio!

Uno necesita tiempo, mas tiempo,
¡todo el tiempo!

Dios: mosca perruna en el bolsillo
del rico; piercing en el prepucio
del obispo; hostia adulterada
y sin pudor.

Si Él fue el Huevo, el Óvulo de todo,
antes tuvo que haber una gallina.

¡Dios, como duelen los pretéritos!

         Santos Jiménez    26/12/2014

jueves, 27 de noviembre de 2014

Caquis



Hay en los huertos
melancólicos árboles
de los que cuelga la miel.

Pulpa aterciopelada
que nos deja en la boca
un temblor de molusco.
Cuando vuelan las hojas
y el viento del norte
como un cartero loco
las mete en los portales,
queda el caqui desnudo
ofreciendo su fruta.
Citando a la intemperie.

miércoles, 25 de junio de 2014

Veneno



La poesía es un veneno.
Muerte es, que es vida.
Mátame. Mátame ya,
criminal y zalamera.
A puñal. En tajadas.
¡Destaza! A navaja. 
A guadaña.

Es un veneno, es un veneno.
Como la vida.
Como la uva del alba
entre tus piernas.

Dejadme con ella.

        S. Jiménez  25/6/2014

jueves, 19 de junio de 2014

Infierno Canto XXLV (Divina comedia)



“Pues te conviene, tu pereza espanta
–dijo el maestro–, que en la blanda pluma
fama no has de ganar, ni so la manta:

quien sin ganarla su vivir consuma
igual vestigio dejará en la tierra
que humo en el aire o en el agua espuma.

Levántate, de ti el sopor destierra,
pues siempre vence el animoso pecho
si por culpa del cuerpo no la yerra.”

                             Dante Alighieri

Y entonces pensé yo: ¿qué, de provecho,
hice hasta hoy por culpa de mi cuerpo,
que en vida y sin delito pena de hecho?

                          S. Jiménez

lunes, 26 de mayo de 2014

Pájaro sanador



Para aquellos a los que el día
trajo un dolor
y vieron calma y consuelo
en el vuelo de un pájaro.

Porque no siempre vuela un pájaro
en nuestros ojos
abrazando soledad,
hermanando gramos de pluma
con quebranto de huesos.

Hay algo hermoso en este encuentro:
hombre y pájaro: 
roca y aire,
pesadumbre y deleite.

¡Ah, qué gusto, compartir primavera
con herrerillos!

  S. Jiménez   26/5/2014